Expedientes ALFA - OMEGA

Misterio e intriga de principio a fin... curiosidades, hechos bizarros e increibles, lo "paranormal": todo lo diferente a la cotidianeidad tiene lugar en esta bitacora de fenomenos e interrogantes de dificil respuesta... porque ¡aún no hemos perdido la capacidad de asombro!

viernes, enero 21, 2005

Clarin.com > Ultimo Momento > Recompensaran con 2,4 millones de dolares a dos policias que golpearon a un joven negro

domingo, enero 16, 2005

La cara oculta de la Magdalena - LA NACION LINE

LA NACION LINE

La cara oculta de la Magdalena


Un sinfín de investigaciones da cuenta de que no fue prostituta. Mujer de recursos, habría ayudado a financiar la prédica de Jesús. La revisión histórica de su mítica figura afirma que fue su discípula dilecta y hasta pudo haber rivalizado con el apóstol Pedro


La pintaron como la más bella. La cantaron como la que derramó mayor cantidad de lágrimas. Joaquín Sabina la soñó dueña de "un corazón tan cinco estrellas que hasta el hijo de un Dios, una vez que la vio, se fue con ella".

María Magdalena. Ni por asomo es la figura más citada del Nuevo Testamento: apenas se la menciona doce veces. Pero eso bastó para granjearle siglos de pinturas, poemas, novelas, canciones, peregrinaciones, devoción popular. Y polémicas.

Con esa marca irrumpe en el siglo XXI. De la mano de teólogos, feministas, investigadores y arqueólogos que están revisando la historia tantas veces contada. A partir de sus estudios, emerge una nueva Magdalena: una mujer que no habría sido prostituta, sino la mejor discípula de Jesús. Que incluso habría disputado con el apóstol Pedro el liderazgo del incipiente movimiento cristiano. De confirmarse la más leve de estas hipótesis, las consecuencias culturales y religiosas serían enormes.

Así lo creen los realizadores de Las dos Marías, documental emitido en Navidad por la CNN: "Los debates no están claramente terminados debido a la importancia de los temas subyacentes: la autoridad en la Iglesia y el rol de la mujer ?dice Sigourney Weaver, narradora del programa?. Pero este renovado interés en María Magdalena podría marcar el camino a un mejor futuro, una vez recuperado el pasado auténtico".

Hasta hace poco, la existencia de estas investigaciones era conocida sólo por un reducido circuito académico. El éxito de ventas de la novela El Código Da Vinci hizo que, repentinamente, esas recoletas discusiones llegaran al público masivo. Se sabe: el libro de Dan Brown es pura ficción. Sin embargo, en la arbitraria sucesión de datos que manipula el novelista asoman indicios de debates reales. Son la punta del iceberg de una historia tan apasionante como la mejor novela de intrigas.

¿Quién fue el personaje histórico conocido como María Magdalena? La respuesta exige prepararse para un viaje a los comienzos de nuestra era. Hay que situarse mentalmente en una época donde la distinción entre cultura occidental y oriental no tenía sentido. La escritura era recurso de unos pocos. La mayoría de las tradiciones se transmitía de manera oral. ¿Cómo reconstruir procesos desarrollados en semejante marco? Historiadores y arqueólogos deben manejarse con jirones de documentos que sobrevivieron a la destrucción del tiempo y las guerras. Interpretar esa delicada cadena de datos exige la sagacidad de un detective. Así lo entendió la teóloga holandesa Esther de Boer, autora de María Magdalena, más allá de mito (Lumen). En su investigación, De Boer estudió los cuatro evangelios que forman el Nuevo Testamento (Marcos, Lucas, Juan, Mateo), tratados de historiadores de la época, documentos no literarios (papiros, restos arqueológicos) y "lo que restituyó la arena del desierto": una serie de códices encontrados en Egipto entre fines del siglo XIX y mediados del XX. Los más famosos son los de Nag Hammadi, que incluyen el Evangelio de Tomás y el Evangelio de Felipe. Se trata de textos escritos por cristianos gnósticos, una tendencia que tuvo un importante desarrollo durante el siglo II. Luego fueron declarados herejes, y la mayor parte de sus documentos se perdieron. El hallazgo de algunos de estos escritos está permitiendo conocer mejor las controversias que conmovieron al primer cristianismo.

A partir de todos estos materiales, De Boer construyó su hipótesis sobre la María Magdalena histórica. "Debía su nombre a la ciudad de Magdala, de donde provenía ?indica la teóloga holandesa?. Era una próspera ciudad ubicada sobre el mar de Galilea, en el centro del tráfico comercial de la época." Una urbe rica, que sufría bajo la dominación romana y protagonizó numerosas revueltas. La estudiosa supone que la joven María habría disfrutado de un fluido contacto con las culturas helénica y judía. Pero también habría padecido los efectos de la convulsión política. Estas vivencias la podrían haber hecho especialmente receptiva a la prédica no violenta y espiritual de Jesús.

De Boer coincide con otros investigadores al indicar que, junto con otras mujeres, formó parte del núcleo más íntimo de discípulos. Algunos incluso afirman que participó en la Ultima Cena. Y suman siete discípulas mujeres a los tradicionales doce. María de Magdala habría sido la más cercana al Maestro. En esto coinciden tanto los evangelios gnósticos como los del Nuevo Testamento. De acuerdo con estos textos, presenció la Crucifixión de Jesús, su entierro, vio la tumba vacía y fue la testigo privilegiada de la Resurrección. FueÛ valiente, porque permaneció junto a la cruz cuando los discípulos varones huyeron. Y fue la elegida, porque a ella se le encomendó difundir "la buena nueva". Se lo piense desde la fe o desde la visión histórica, todo señala que tuvo un lugar de suma importancia.

Otros estudios sugieren que podría haber predicado ella también, haber tenido sus propios discípulos y hasta haber sido objeto de los celos de Pedro, que la consideraría su rival.

¿Cómo hacía una mujer para llevar el tipo de vida inestable que exigía pertenecer al grupo de Jesús? La investigadora Susan Haskins, autora de María Magdalena: mito y metáfora, afirma que era una mujer económicamente independiente. Esto lo deduce porque nunca aparece definida por su relación con un hombre, sino por su lugar de nacimiento. Haskins sugiere que aportaba recursos para que los predicadores itinerantes llevasen adelante su trabajo. Se sabe que en aquellos tiempos existían mujeres que tenían posesiones y se expresaban públicamente. En esta línea se inscribe el profesor Marvin Meyer, de la Universidad Chapman. En el citado documental de la CNN, explica: "Todo parece indicar que en el origen del movimiento cristiano las mujeres jugaban un papel fundamental".

Independiente, con recursos, merecedora de la mayor confianza de Jesús. ¿Qué hay de la sensual "mujer pública" arrepentida? No existió. Fue un error de interpretación que prevaleció durante catorce siglos.

Ahora bien, la imagen de la prostituta tiene una enorme fuerza cultural. La Iglesia la rectificó a fines de los años 60, sin que este acto tuviera mayores repercusiones. El Concilio Vaticano II (1962-1965) ordenó hacer una revisión del Misal Romano. En la publicación resultante, María Magdalena aparece definida como "una de las mujeres que seguían a Cristo en sus viajes". Ni rastros de la famosa penitente.

Para encontrarla, hay que remontarse al siglo VI. Tiempos del papa Gregorio Magno. En ese momento es cuando se realiza la gran operación que definiría la identidad de Magdalena durante los siglos venideros.

Era una época turbulenta. El Imperio Romano de Occidente se derrumbaba, asolado por plagas, hambruna y la amenaza de invasiones germánicas. El cristianismo había pasado de ser una secta perseguida a convertirse en religión oficial. En este contexto, la necesidad de unificar el credo era también un imperativo político. Gregorio se propuso dar respuestas claras a las inquietudes de los creyentes, aun a costa de la simplificación. En la lectura de los evangelios a veces se suscitaban confusiones ante la presencia de diversas mujeres que respondían al nombre de María. Entonces, Gregorio fundió en una sola mujer las características de tres: María Magdalena, María de Betania y una pecadora no identificada que aparece en los textos de Lucas. De la síntesis de esas tres figuras surge la prostituta arrepentida que, además, participa en los sucesos de la Pasión.

Las corrientes feministas leen este hecho en clave de género. Para ellas, de lo que se trató fue de consolidar una Iglesia signada por la mentalidad masculina, en la que no habría espacio para voces femeninas. La figura de María Magdalena resultaba conflictiva; entonces, se la convirtió en prostituta.

La profesora Katherine Ludwig Jansen (colaboradora del libro Los secretos del Código) tiene una postura más moderada. "Sería un grueso error de interpretación histórica verlo como una conspiración o un acto malicioso de parte de Gregorio Magno ?señala?. Lo que ocurría es que necesitaba crear alguna suerte de certeza y estabilidad para su comunidad." Para Jansen, la identificación arraigó porque satisfacía una necesidad profunda desde el punto teológico: "Reconfigurada como gran pecadora, estaba en posición de transformarse en una gran santa".

La argentina Diana Rocco Tedesco (doctora en Historia por la UBA) esgrime una opinión similar. "La propuesta de los primeros cristianos, que era innovadora en cuanto al lugar de la mujer, se adaptó muy tempranamente al patrón social hegemónico. Es decir, al patriarcado. Eso mismo fue lo que le permitió a la nueva Iglesia sobrevivir y perdurar."

Finalmente, el interrogante que estimuló la imaginación de varias generaciones: ¿existió un vínculo sentimental entre el Nazareno y María de Magdala? El tema fue muy tratado desde la ficción. José Saramago lo incluye en su libro El evangelio según Jesucristo. También el griego Nikos Kazantzakis en La última tentación, novela que Martin Scorsese llevó al cine. Dan Brown es el que llegó más lejos: en El Código Da Vinci sugiere una relación conyugal con posible descendencia.

Pero, ¿qué tienen para decir los estudiosos del tema? "No hay evidencia", responden.

Con respecto documentos tales como el Evangelio de Felipe, donde se puede leer que "el Salvador amaba a María Magdalena más que a todos sus discípulos y acostumbraba besarla en la boca", Esther de Boer afirma: "Estos textos muestran la intimidad entre maestro y alumna. No se debe entender este besar en el sentido sexual, sino en el espiritual".

Lo cual no es poco para quienes reivindican a la nueva Magdalena. Se trata, nada menos, de la distancia que va de la pecadora perdonada a la discípula respetada y elegida. Distancia abismal, por cierto. Tan abismal como el misterio que desde hace tres milenios rodea a la enigmática mujer oriunda de Magdala.

Por Diana Fernández Irusta

Para saber más:
www.magdalene.org
www.beliefnet.com

Redescubrila
Por Diana Rocco Tedesco (*)

María Magdalena era una de las seguidoras y discípulas de Jesús. Por el lugar que ocupa en los evangelios canónicos, es la más importante de ellas, puesto que en todos los textos que la nombran, menos uno (Juan 19:25), siempre aparece en primer lugar, y este dato es importante para establecer su rango. Que Jesús aceptaba discípulas mujeres está claro también en el Evangelio de Lucas 10:39. Allí se menciona a otra María, "que se sentaba a los pies del Señor", un eufemismo para señalar que era aceptada como discípula. Aunque no imposible, esta situación era muy rara en tiempos de Jesús, y puede decirse que es uno de los aportes del temprano movimiento cristiano, que nivelaba a mujeres y hombres sin hacer diferencias entre ellos por causa de su sexo. Así, Pablo en la Epístola a los Gálatas 3:28, dice: "Ya no hay judío ni griego, ni esclavo ni libre, ni hombre ni mujer, ya que todos vosotros sois uno en Cristo Jesús". Esta proclama propia de un nuevo movimiento que luchaba por una sociedad más justa, pronto fue matizada con expresiones más moderadas. El protagonismo de María Magdalena es recogido también por algunos grupos gnósticos que la convierten en la intermediaria entre el Maestro y sus discípulos. Así aparece en el Evangelio de María, donde la Magdalena encarna la postura del grupo heterodoxo y Pedro, protestando por tener que recibir enseñanza "de boca de mujer", la posición de la Iglesia obispal monárquica que triunfa en Nicea en 325. Otros evangelios gnósticos ofrecen la imagen de una relación cercana e intensa de María con Jesús. Esto señala que el lugar de las mujeres en estos grupos era destacado. Podían predicar, recibir revelaciones directas del fundador del movimiento y enseñar. La Iglesia, que se impone a través de su alianza con el poder político imperial, confinó a la mujer al espacio privado y destinó al hombre el espacio público y de poder. El ámbito privado podía ser su hogar o el convento, pero siempre había un varón que las cuidaba, bajo cuya autoridad estaban. Las mujeres quedaron relegadas al lugar de adolescentes eternas, que necesitaban de ese cuidado. Esto por supuesto era una construcción cultural que justificaba el lugar social que se les adjudicaba. ¿Por qué podemos ahora redescubrir a María Magdalena? Porque las mujeres nos redescubrimos a nosotras mismas y podemos hacer una lectura de los mismos textos bíblicos y no bíblicos que se leyeron durante 2000 años desde otro lugar, el nuestro. María Magdalena es un arquetipo femenino que hemos rescatado de la historia del cristianismo porque demuestra que las mujeres podemos ser protagonistas y ocupar espacios públicos. Ahora lo podemos aceptar y entender, porque gracias a una larga historia de luchas feministas, la sociedad está lo suficientemente madura como para reconocer este nuevo lugar relacional de lo femenino/masculino.

(*) Especialista en Historia de la Iglesia Antigua

La discípula
Por Luis Heriberto Rivas (*)

Entre los discípulos de Jesús había varones y mujeres. Una novedad en ese tiempo, porque los maestros no admitían discípulas. María Magdalena fue una discípula de Jesús que se destacó por ser la primera en ver al Señor Resucitado. Enviada por El, anunció este hecho a los Apóstoles, y por eso fue llamada en la antigüedad apóstol de los apóstoles. Por esa razón, algunos siglos después, varios evangelios "apócrifos" la presentaron como poseedora de mensajes que Jesús no había dado a los apóstoles.

Por un error histórico ?producido entre los siglos V y VI? María Magdalena (o María de Magdala) fue confundida con otra María, la hermana de Lázaro (María de Betania). Además, la hermana de Lázaro derramó perfume sobre los pies de Jesús, como en otra oportunidad lo hizo una anónima pecadora arrepentida. Entonces las dos "Marías" fueron confundidas con aquella pecadora y todavía hoy mucha gente habla como si ésta fuera María Magdalena. Son escenas parecidas en las que intervienen personas diferentes, pero por estas semejanzas se terminó hablando de tres mujeres como si fueran una sola.

El evangelio no dice que María Magdalena haya sido la pecadora arrepentida. Tampoco hay indicios de que estuviera unida a Jesús por lazos afectivos especiales o por matrimonio. Eso lo dicen los que toman en este sentido los gestos de la pecadora arrepentida de Lc 7, 37-38 o de María de Betania en Jn 12, 3, pero entienden mal esos textos y confunden a María Magdalena con otras mujeres.

(*) El Pe. Rivas es profesor en la Facultad de Teología de la UCA

Los libros

Algunas de las numerosas publicaciones que la mencionan: Gerald Messadié, El complot de María Magdalena, Grijalbo (ficción); Martín Mazora, María Magdalena condenada, Sigmur (ficción); Esther De Boer, María Magdalena, más allá del mito, Lumen (ensayo); Verdad o ficción, Lumen (ensayo); Los secretos del Código, Emecé (ensayo); Iker Jiménez, Diccionario del Código Da Vinci, Edaf (ensayo); René Chandelle, Más allá del Código de Da Vinci, Robin Book (ensayo).

Fortaleza de vida
Por Esteban Lopez Del Pino (*)

María Magdalena es fuente de esperanza en nuestro camino de identificación con Cristo. El evangelio nos habla de una mujer que fue librada de varios demonios. Sabemos que algunas mujeres, tras recibir algún favor por parte del Maestro, decidían servirle con sus bienes; éste es también el caso de María Magdalena. Ella nos señala que el "amor con amor se paga". Por tanto, es natural, al contemplar su vida, que nos preguntemos cómo manifestamos nuestro agradecimiento ante tantas gracias recibidas.

Jesús encuentra en el corazón de María Magdalena un amor que irá creciendo y llegará a tener la manifestación madura de permanecer junto a la cruz, cuando muchos de los apóstoles ?hombres rudos? sintieron temor y lo abandonaron. Jesús resucitado se aparece primero a dos personas que eran pecadoras, pero que buscaban cambiar a través de la contrición: Pedro y Magdalena. Como decía San Josemaría Escrivá de Balaguer, la vida cristiana consiste en comenzar y recomenzar una y otra vez, siempre. Por eso, no nos resulta extraño observar, en las últimas páginas de los evangelios, el relato del encuentro de Jesús con María Magdalena. En esa escena, una vez más, nos llenamos de esperanza, sabiendo que a pesar de nuestras miserias por el arrepentimiento podemos llegar a ser muy buenos amigos de Cristo, que eso son los santos.

(*) Coautor del libro "Verdad o Ficcióndel Código Da Vinci", Ed. Lumen

http://www.lanacion.com.ar/edicionimpresa/suplementos/revista/nota.asp?nota_id=671209
LA NACION | 16.01.2005 | Página 00 | Revista

sábado, enero 15, 2005

Clarin.com > Revista ? > Historia de la locura escrita

jueves, enero 13, 2005

Clarin.com > Ultimo Momento > La perra fue clave en la supervivencia de Nahuel

Clarin.com > Ultimo Momento > Aparecio con vida el chico perdido hace 10 dias en Bariloche

miércoles, enero 12, 2005

Clarín.com le ofrece en formato RSS todos los títulos de las noticias - Clarin.com

Clarin.com

¿Qué es el RSS?

RSS (?Rich Site Sumary? o ?Really Simple Syndication?) es un formato XML que permite acceder a canales de noticias centralizados en una aplicación. Con RSS usted puede ver en un solo lugar las actualizaciones de distintos sitios. Generalmente se publican titulares con links a los contenidos completos.


¿Cómo funciona?



Para leer los envíos de RSS, necesita un ?agregador? o "lector de noticias?. Con el ?agregador? usted puede sumar los sitios de su interés que tengan RSS (los links generalmente van acompañados por este ícono: )
Cada vez usted abra el ?agregador?, aparecerán las noticias de los sitios que eligió.
Además, le avisará al instante cuando haya una actualización.

Clarin.com > Conexiones > Mil expertos y sus pronosticos sobre el futuro de Internet

martes, enero 11, 2005

Clarin.com > El Mundo > Catastrofes naturales
Son cada vez mas mortiferas por culpa del hombre

Ubican el pueblo donde Don Quijote inició sus aventuras

Recuerdan hoy al "ingenioso hidalgo"

Ubican el pueblo donde Don Quijote inició sus aventuras

Villanueva de los Infantes sería ese lugar de la Mancha

Lo sostiene un estudio hecho por expertos de seis disciplinas científicas Se fijaron en detalles geográficos y en cuántos kilómetros diarios podían hacer un caballo y un burro

VILLANUEVA DE LOS INFANTES, España (EFE).- Los vecinos de Villanueva de los Infantes, lugar donde un estudio científico sitúa el inicio de "El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha", llevarán a cabo, a partir de hoy, una copia manuscrita de la novela de Cervantes para conmemorar el IV centenario de su publicación.

Así lo anunció hoy el alcalde de esta villa de la provincia de Ciudad Real, Mariano Sabina, durante la presentación del estudio "El Quijote como un sistema de distancias tiempos", que, realizado por un equipo científico de la Universidad Complutense de Madrid, sitúa en Villanueva de los Infantes el inicio de las aventuras del hidalgo Alonso Quijano. Villanueva de los Infantes sería, según la conclusión del estudio, el lugar del que Don Miguel de Cervantes Saavedra "no quiso acordarse" al escribir su novela, hace cuatrocientos años.

Francisco Parra Luna, catedrático de Sociología y miembro del equipo que ha llegado a esta conclusión, explicó que este estudio se ha llevado a cabo a lo largo de más de dos años por diez expertos en geografía, historia, filología, sociología, matemáticas y ciencias de la información. Los expertos han aplicado por primera vez una metodología científica y un estudio exhaustivo de las distintas posibilidades para la localización del lugar de inicio de las aventuras de Don Quijote.

Según Parra, había veintisiete pueblos reales que debían encontrarse en el Campo de Montiel, "citado hasta cinco veces en la obra", lugares que han sido estudiados y confrontados con 24 variables fijadas a partir de datos del texto. Para eso se siguieron hasta once hipótesis de trabajo y se valoraron cuestiones como la velocidad a la que Don Quijote y Sancho marchaban a lomo del caballo Rocinante y del burro, que, según el estudio, vendrían a ser de 31 kilómetros en días de verano y 22 en días de invierno.

Las tres pistas definitivas que acabaron por apuntar a Villanueva de los Infantes como ese enigmático lugar fueron que el principal camino de comunicación entre Lisboa y Cartagena -ruta varias veces recorrida por Cervantes- atraviesa el pueblo por la mitad, que hay una cuesta antes de llegar al pueblo, como indica la obra, y que dista exactamente un día y una noche "de invierno" de la localidad de Venta de Cárdenas, en los montes de Despeñaperros, identificada en este estudio como la venta donde Sancho fue manteado.

Consultado por la otra localidad que hasta ahora se señalaba como pueblo de Don Quijote, Argamasilla de Alba, Parra indicó que, frente a la gran cantidad de variables de distancias, tiempos y datos topográficos y sociológicos que confluyen en Infantes, en Argamasilla "tan sólo coincide que tiene río".

Según este estudioso, Cervantes situó sus coordenadas geográficas en Villanueva de los Infantes quizá porque "ningún otro punto como él representaba el centro geográfico, político y cultural del Campo de Montiel y era un lugar al que quería homenajear" y que puede ser que "Cervantes tuviese familiares en la localidad con los que se documentara", ya que actualmente existen en Infantes varias familias con el apellido Saavedra.

http://www.lanacion.com.ar/cultura/nota.asp?nota_id=669965

Tomado de: LA NACION

domingo, enero 09, 2005

La vigencia del Quijote de la Mancha

CULTURA: MIGUEL DE CERVANTES SAAVEDRA


La vigencia del Quijote de la Mancha


Ya pasaron cuatro siglos desde que la pluma de Cervantes le dio vida al hidalgo caballero de la Mancha. Inspirado en buena parte de la azarosa vida de su autor, El Quijote sigue vigente como una de las obras cumbres de la literatura universal.

--------------------------------------------------------------------------------
Alberto Amato.
aamato@clarin.com

El mismo fue un Quijote, enorme, desmedido, también errante, sin ese jamelgo flaco y hastiado que corrió las andanzas de su Alonso Quijano, pero con el mismo espíritu libertario, caótico y rebelde de su personaje máximo.

Construyó una obra inmortal, parió para los siglos un idioma enriquecedor, inagotable, perpetuo. Sus frases, célebres, dan cuenta de una pluma sin igual.

Fue el padre de la novela moderna, colocó a su Quijote enloquecido al lado de los mares de la Ilíada, de las batallas de la Odisea y de los círculos de la Divina Comedia; fue aventurero, esclavo, condenado, desdichado y héroe de guerra; cargó con una familia calamitosa y desventurada y con la dudosa profesión de ser Comisario Real de Cereales y Aceites de su muy graciosa majestad don Felipe II; y murió pobre y casi solo, sin saber que cuatro siglos después todavía reverenciamos su obra, su vida, sus decires, sus cantares y, al igual que su Quijote infinito, navegamos los mares terrosos de nuestras propias llanuras manchegas, a la grupa de lo que podamos y sin poder ya batallar.

Y todo lo hizo don Miguel de Cervantes Saavedra escudado detrás de un rostro oval, rubicundo e inocente, detrás de una nariz de águila y de unos ojos de mirar el mundo con la impronta de los granujas a los que intentaban dar seriedad y prestancia una barba en punta y unos bigotazos hacia abajo que sellaban una boca en línea que no se abría para sonreír, porque don Miguel no tenía más que seis dientes. Y podridos. Así, con ese rostro en el que flota un dejo de tristeza, nos lo pintaron para siempre en una especie de retrato único, un icono inmortal como su obra de gloria que le dio tanta fama y tan poca fortuna.

Se sabe poco de él. Sobre todo de sus años iniciales. Pergeñó su Quijote tal vez a los cuarenta y cuatro años y lo vio publicado cuando tenía cincuenta y siete.

Se murió doce años después, con el retintín de la celebridad endulzando sus oídos. Y nada más.

Cuando hubo que reconstruir su vida, todo estaba sepultado en el pasado incierto, enterrado junto a la lanza de embestir molinos de su personaje más amado.

Don Miguel nació en Alcalá de Henares en 1547. Está bautizado en la parroquia de Santa María la Mayor el 9 de octubre de 1547.

A veces se toma esa fecha como la de su nacimiento, porque a los recién nacidos se los bautizaba entonces como de rayo, porque la muerte batía las alas sobre ellos.

Pero el 29 de setiembre es la fiesta de San Miguel, y es probable que Don Miguel haya nacido entonces, y de allí el nombre. Tres años después la familia vivía ya en Valladolid.


El fugitivo

El padre, Rodrigo de Cervantes, era un cirujano de poca monta, itinerante y vagabundo, lo que llevó a pensar a algunos historiadores que el padre de Don Miguel fuese tal vez un converso en aquella tierra que había expulsado a los judíos. Los cervantinos niegan semejante posibilidad. La madre Leonor de Cortinas tuvo siete hijos, dos murieron muy chicos, y Don Miguel fue el tercero después de dos mujeres.

Es todo. Don Miguel de Cervantes aparece después en 1566, a los diecinueve años, con su familia radicada en Madrid y él bajo la vara del catedrático de gramática Juan López de Hoyos, quien en 1569 incluye tres poemas del joven Miguel en un libro dedicado a la infortunada Isabel de Valois, tercera mujer del no menos infortunado Felipe II que la había perdido el año anterior.

Para cuando esos poemas primeros ven la luz -origen de su vida literaria-, el joven Miguel, de veintidós años, ya no está en Madrid. Está en Roma. Es un fugitivo. Hirió en duelo a un tal Antonio Sigura y está condenado en rebeldía. Tumulto, espada, fuga, caminos abiertos. Miguel delinea a su Quijote. Ha leído ya cerca de doscientas novelas de caballería. No ha perdido la razón como su personaje, pero como a su Don Quijote del futuro le remueven el pecho unas pasiones incontroladas por las aventuras y los caminos en un mundo que se acaba: "Las armas requieren espíritu como las letras", dirá Don Miguel. Y dos años después, el 7 de octubre de 1571 es un soldado más a bordo de la galera Marquesa, que forma parte de la armada cristiana que está por decretar el principio del fin del Imperio Otomano: trescientos barcos, ochenta mil hombres, que a la batalla se va con lo que se tiene, todos bajo la espada de don Juan de Austria. Y Miguel, con fiebre, en la bodega de la Marquesa que enfila hacia Lepanto.

Le sugieren que mejor no. Que más le vale el resguardo, que puede terminar asaeteado por las balas infieles. Pero Miguel contesta "qué dirán dél, y que no hacía lo que debía y que más quería morir peleando por Dios y por su Rey que no meterse so cubierta por su salud". Una quijotada. Sale herido de dos arcabuzazos en el pecho y un tercero en una mano. Duelen más en el orgullo. Los del pecho se curan y la mano izquierda queda estropeada, anquilosada y yerta. Aun tullido, el muchacho se batirá al año siguiente en Navarino, en la azul Corfú y en Túnez, siempre en pos del infiel y en aras de su buen rey. Don Miguel honrará siempre el recuerdo de esas batallas y sus heridas. Y su Quijote vivirá con ufanía sus embates de ciego contra los enemigos agigantados por la sinrazón, y el agraz de su cuerpo descoyuntado le endulzará las noches de fatiga.


Una vida de novela

Por fin Don Miguel regresa a España. O eso intenta. Lleva en la escarcela unas cartas de recomendación de don Juan de Austria. Pero el 26 de setiembre de 1575, cerca de Cadaqués, una flotilla turca asalta la galera en la que viaja, la Sol, y Miguel cae prisionero junto a Rodrigo, su hermano menor. Las cartas de don Juan hacen pensar que quien las porta es rico y que por él se puede pedir un buen rescate. Un mal entendido. Don Miguel es entregado como esclavo a un renegado griego. Una novela.

Pasa cinco años como cautivo y como esclavo en Argel.

Intenta fugarse cuatro veces, pero siempre es delatado por falsos amigos, por sacerdotes corruptos, por mostrencos falaces y turbios. Su Quijote del futuro le dará alas a la libertad y a la lealtad, a la amistad y a la nobleza. Sancho. ¿Es así como se forja una obra inmortal? ¿En qué cosas piensa Don Miguel mientras piensa e imagina a su Quijote?

¿Cómo es que a cuatro siglos de ver la luz, ese flaco delirante, puesto en ridículo y castigado por los hombres y el destino, con un ladero ramplón y mal entretenido, pueda ser aún un ejemplo universal, un faro, un paradigma? ¿Es su espíritu rebelde y justiciero? ¿Es su deseo de cambiar el mundo para bien? ¿Es su insistencia fatalista de cargar contra lo inamovible, esos molinos que se agitan como gigantes, para derrotar a la mediocridad, a lo obvio? Desde el Quijote a hoy, los molinos han instrumentado una estrategia de resistencia: cambiar algo es soñar en vano, es una ilusión, una utopía, una ficción, es un mito, un ensueño, una quijotada. Pero no. Es Cervantes.


¿Dulcinea es Dulce Ana?

El 19 de setiembre de 1580 pagan rescate por el esclavo Don Miguel que deja Argel y su odisea junto a otros cautivos. Llega a España en octubre, cuando en el otro lado del mundo su compatriota Juan de Garay hace ya cuatro meses que fundó por segunda vez otro ejemplo de tozudez fatalista:Buenos Aires. Don Miguel sueña con esas Indias. Quiere organizar su vida, quiere pensar, tal vez escribir. Su familia se endeudó para pagar su rescate; necesita dinero; viaja a Portugal, donde está la corte de Felipe II, y pide que lo envíen al nuevo mundo.

Pero lo envían a Orán, otra vez Argelia, en misión secreta y aún desconocida: ahora es un espía y la aventura continúa.

¿Y el amor? Don Miguel imagina el del Quijote con Dulcinea, la de El Toboso, un pueblo toledano de menos de mil habitantes que hoy muestra a los turistas la casa falsa de la Dulcinea imaginada.

Don Miguel anduvo por allí, tras las faldas de una tal Ana María Martínez Zarco de Morales. Ana. Dulce Ana. ¿Es "Dulcinea" "Dulce Ana? Los amores de Don Miguel van por las casadas. Tiene una hija natural, Isabel, con Ana Villafranca de Rojas, pero se casa el 12 de diciembre de 1584 con Catalina Salazar. Ya escribió su primera gran obra, La Galatea, oscurecida por el resplandor posterior de su Quijote único. El oficio de escritor no le da dinero.

Años después, Don Miguel hará que su Sancho Panza, gobernador de la ínsula de Barataria, grite: "Oficio que no da de comer a su dueño no vale dos habas".


Un soldado valiente

Entre 1587 y 1600 Don Miguel vive en Sevilla para ganarse la vida como "Comisario Real de Cereales y Aceites", oficio de nombre pomposo y empeño ruin: consiste en la requisa de cereales y aceite por la Andalucía empobrecida, con destino al engorde de las arcas reales: Felipe II planea enviar a su Armada Invencible contra Inglaterra.

En agosto de 1588 de la Armada Invencible no queda ya sino el nombre, destrozada por sir Francis Drake. Don Miguel vuelve a mirar a su rey: le presenta su historial de soldado valiente y decidido y su resumen de servicios fieles y jamás bien pagos y pide, otra vez, que le envíen a las Indias y firma con un doble apellido que jamás sabremos de donde le cayó, pero que tiene la música perenne de los tres elementos castellanos: Miguel, de Cervantes, Saavedra.

La respuesta es un portazo en la cara: "Busque por acá en qué se le haga merced". Don Miguel no puede más con su desilusión. ¿Si hubiese venido a Indias, tendríamos hoy Quijote?


Inspiración divina


Es entonces cuando Don Miguel se larga a los caminos. En un rocín flaco y bamboleante, con su cabeza afiebrada por las novelas de aventuras, con una armadura de latón basto, sin peto, sin espaldar, lanza en ristre y sentencioso con el palurdo gordo y fiel que le acompaña en burro.

Allá va Don Miguel, a la grupa del Quijote, a pelear contra su rey que tan mal paga, contra lo inamovible que no deja que nada cambie, contra los molinos que se agigantan en su mente, a defender la espada en los tiempos de la pólvora, el coraje individual por sobre los cañones, el pensamiento contra lo mediático.

El verdadero Cervantes va a la cárcel: cobró comisiones atrasadas, las depositó en una banca de Sevilla, el banquero quebró y Don Miguel da con su osamenta en la prisión. Hace cuatro siglos que el Quijote pelea contra los banqueros que quiebran y contra otros pelafustanes de la misma calaña.Y es allí, tras de las rejas, donde, dirá luego Don Miguel, nace su obra mayor que ya había empezado a diseñar después de la derrota de la Armada Invencible.

La escribe de prisa, a tropezones, trastabilla y da tirones turbado por la ira, por la soledad, por la incomprensión y por ese hidalgo caballero que le sopla al oído la desgracia de sus desvaríos.

Don Miguel está dando forma a una obra monumental, pero ni piensa en ello: va y viene de arriba abajo por esas páginas enfurecidas, satíricas, irónicas, oníricas, proféticas; remedia los saltos de cronología con un recurso ingenuo de aprendiz entusiasta: "Olvidábaseme decir?"; tal vez se divierte como nunca antes en sus años de soldado y de duelista, mientras mezcla el relato con las canciones y los sonetos y las cartas y las descripciones y los romances, mientras inventa para toda la vida un estilo, una lengua, una técnica. Nadie cuenta como cuenta Don Miguel. Y quien no cuenta como Don Miguel, no cuenta.

El siglo nuevo lo sorprende con cincuenta y tres años, le quedan dieciséis de vida, con un rey muerto en 1598 y un rey puesto, Felipe III, que establece la corte en Valladolid. Allí viaja Don Miguel en 1603. Al año siguiente consigue por fin el privilegio real para publicar su novela gigantesca a la que promete una segunda parte. Nadie confía en él: prometió lo mismo con La Galatea y nunca la escribió. La Ana Franca que fue su amor ha muerto, su hija Isabel de Saavedra pasa a vivir con él y con Catalina, su mujer. En la misma viven las hermanas de Don Miguel, Andrea y Magdalena, y Constanza, hija natural de Andrea. De esa casa, de puertas abiertas y sábanas al sol, entran y salen los hombres como gustan. Y gustan entrar y salir.


Chicas ligeras


A las puertas de esa casa, el 27 de junio de 1605 es herido de muerte Gaspar de Ezpeleta sin que el auxilio que le presta Don Miguel alcance y sirva para salvarle la vida. Como suele suceder desde entonces, y por artilugio de leguleyos y escribanos, todos los vecinos de la casa son puestos presos sólo por un día. Pero alcanza y sobra para que Valladolid entero sospeche de la moral de ese hogar donde palomean tantas mozas a las que llaman, con placer malicioso y perverso, Las Cervantas.

Las Cervantas y Don Miguel se mudan a Madrid detrás de la corte de Felipe III cuando, en 1605, El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de La Mancha, dedicado al Duque de Béjar, ya ha sido impreso en Madrid por don Juan de la Cuesta. Cervantes ya incursionó en el teatro y la comedia para llamarse a recato con la humildad de los genios: "Dejé la pluma y las comedias, y entró luego el monstruo de naturaleza, el gran Lope de Vega, y alzose con la monarquía cómica".

En 1615 cumple con su héroe: publica la segunda parte de su obra que ahora está dedicada al Conde de Lemos y se llama El ingenioso caballero don Quijote de la Mancha. Su salud declina.

Tiene sesenta y nueve años y el hígado perturbado y tundido de los caballeros maltrechos, que le dispara una sed de desesperación más inagotable que su sed de justicia. Muere el 22 de abril de 1616 en su casa de la calle de León, en Madrid. Lo entierran en el convento de las Trinitarias Descalzas. Nunca fue posible identificar sus restos. Es el olvido que lo hará inolvidable.


Las líneas del final


Tres días antes de morir, escribió al Conde de Lemos unas líneas conmovidas y conmovedoras que demuestran que en el filo del adiós, Don Miguel no había olvidado ni recursos ni estilo ni talento: "Ayer me dieron la extremaunción, y hoy escribo ésta; el tiempo es breve, las ansias crecen, las esperanzas menguan, y, con todo eso, llevo la vida sobre el deseo que tengo de vivir (...)

Pero si está decretado que la haya de perder, cúmplase la voluntad de los cielos, y, por lo menos, sepa Vuesa Excelencia este mi deseo, y sepa que tuvo en mí un tan aficionado criado de servirle, que quiso pasar aún más allá de la muerte mostrando su intención."

Lo lograste, Miguel. Costó, pero lo hiciste. Fuiste mucho más allá de tus intenciones.

Hace cuatro siglos que Don Quijote cabalga con Don Miguel a la grupa desandando caminos por un lugar del planeta de cuyo nombre no quiero acordarme.

Los dos, Don Miguel y su Quijote, todavía tienen algo que decirnos. Y haríamos muy bien en escucharlos.

Tomado de: Clarín.

miércoles, enero 05, 2005

Obsesiones, curiosidades y secretos del mundo de los coleccionistas

TENDENCIAS

Obsesiones, curiosidades y secretos del mundo de los coleccionistas


Una persona caprichosa, muy bien informada, sumamente meticulosa y un poco obsesiva no siempre es alguien de quien es mejor estar lejos. A veces, es un buen coleccionista...

--------------------------------------------------------------------------------
Por Carla Barbuto. . Especial para Clarín.com
conexiones@claringlobal.com.ar

?¿Tenés una griega con la imagen de una lechuza?? No es una duda bizarra. Al menos en el mundillo de coleccionistas que se encuentran los domingos en Parque Rivadavia. Es así de simple, mientras los más tradicionales se quedan con monedas, medallas, estampillas o postales, hay coleccionistas para todos los gustos y los más arriesgados se lanzan tras sacapuntas, muebles en miniatura, botellas vacías, servilletas de bares, bastones, muñecas maniquí o sobrecitos de azúcar... ?Empecé a coleccionar postales de la Antártida hace 15 años. Si superás la etapa de ver todo blanco o celeste, te vas a dar cuenta que cada imagen es única porque las personas que las sacaron seguramente sintieron cosas distintas...?, explicó Joaquín Medina demostrando que la cartofilia puede ser un hobbie bastante misterioso.

Además de contar con cierta sensibilidad y predisposición especial, el coleccionista suele ser una persona extremadamente cuidadosa de su tesoro, ya sea de monedas romanas o de botellas de perfume vacías. ?El coleccionista es muy celoso y no le gusta que cualquiera toque su colección porque es su tesoro y, la mayoría de las veces, la gente no entiende?, explicó Alejandro Argüello, propietario de Filatelia Argüello. Ya lo decía Ed Victory -el coleccionista de guías telefónicas de la última novela de Paul Auster, La noche del oráculo- ?no toque nada pero mire todo el tiempo que quiera?.

Ahora bien, ¿cuál es el ABC de un buen coleccionista? Está claro que cada uno define su propio perfil, pero la mezcla ideal debería contar con mucha paciencia, una dosis de conocimiento especializado y cuidado celoso por la colección. Todo cargado de una pizca de obsesión. Al menos, eso piensa Martha Teisaire, quien exhibe una colección de 10.000 postales anteriores a 1930 todos los domingos en el puesto 005 de la feria del Parque Rivadavia. ?El coleccionista es un ser obsesivo. Por ejemplo, si existen tres postales de un mismo edificio desde tres tomas diferentes, el verdadero coleccionista se va a interesar por todas sin dudarlo ni por un instante?, aseguró en voz baja. Y esa especial manera de ser parece vox populi en este mundillo. Ricardo Oscar Juárez, miembro de Asociación de Cronistas Filatélicos Argentinos (ACFA), opina que ?la filatelia obliga al principiante a ser ordenado, meticuloso, no fumar, saber de geografía y de historia. Se debe estudiar muy bien cada sello y es vital tener muy claro que no es un hobbie barato?.

De este modo, Juárez puso el dedo en la llaga y, si faltaba un elemento en la definición del coleccionista, ese es el capital disponible para mantener el hobbie. ?Como a veces es caro meterse en tema, yo tengo colecciones para principiantes con monedas lindas?, dijo Héctor Gambetta, miembro de Centro Numismático Buenos Aires. Y el tema está en el aire aunque Argüello prefiere no indagar y prefiere decir que ?el coleccionista es aquel que se concentra meticulosamente en un tema específico, sabe qué colecciona, se informa, se especializa y tiene un criterio. No lo hace atento a cuestiones económicas sino por placer?. Sin embargo, el hobbie tiene un precio y, en el caso de las monedas por ejemplo, suele cotizarse en dólares.

Más allá del capital invertido, está claro que el fuego sagrado por pasa por ahí. ?Empecé mi colección hace 13 años y tengo más de mil dedales de plata de todo el mundo. Un carpintero hizo un mueble para exhibirlos bien y tengo cuadernos especiales en los que llevo un control con la descripción de cada uno. ¿Te parece exagerado? A mi no?, dijo Mercedes Taboada. Entonces, como diría Auster: ?No estoy seguro, pero tengo la impresión que esto es algo más que una distracción para usted...?

Tomado de: Clarin.

domingo, enero 02, 2005

Los Misteriosos Reyes Magos...

"...HISTORIAS

Reyes Magos: un viaje mágico

Cada 6 de enero llegan con sus tradicionales regalos. La Biblia cuenta que hace más de dos mil años arribaron a Belén para ver al niño Jesús. ¿Pero cómo viajaron? ¿De dónde venían? Las hipótesis sobre ese misterioso viaje.


Eliana Galarza.
egalarza@viva.clarin.com.ar

El viaje empezó y terminó, tal vez, hace más de dos mil años. Pero todavía hoy, pese a que se lo investiga, es un misterio que nadie consigue develar. Si la tradición fuera la única fuente de datos, los protagonistas serían 3 reyes, magos, a bordo de camellos enjaezados con telas y equipaje vistosos. Pero algunos datos arqueológicos y las especulaciones de historiadores audaces se encargaron de armar una verdadera rosca de Reyes. No eran magos, no eran tres, no eran de la realeza. Pero viajar, viajaron. El problema es que nadie sabe bien cómo, cuándo y por dónde siguieron a la famosa estrella de Belén.

Las hipótesis son variadas y se basan en la polémica sobre los orígenes de esos hombres misteriosos que le regalaron oro, mirra e incienso al niño Jesús a poco de nacer. La primera de ellas sugiere que provenían de Persia. Es lo que se infiere por la descripción de sus trajes. Algunos detalles de magnificencia (las túnicas, las capas y los adornos sobrecargados) tienen que ver con los usados por ciudadanos persas en aquella época. Además, entre ellos se profesaba el zoroastrismo, una religión que al igual que la cristiana creía en la llegada de un mesías. Según su doctrina, la fecha de nacimiento de Jesús coincidía con ese acontecimiento.

Por eso partieron desde allí unos enviados especiales para darle la bienvenida. Allí también se encontraría una de las claves para explicar por qué a esos embajadores se los llamó magos.

Palabras mágicas

Al parecer, lo de magos surgió por la deformación de magoi, palabra persa que hacía referencia a personas sabias y con ciertos conocimientos de astrología y astronomía. "El Evangelio de San Mateo menciona unos magos que, desde el Oriente, fueron a Belén. Pero no habla de reyes ni precisa que eran tres sino un número indeterminado. En la Antigüedad se llamaba magos a los sabios que se ocupaban de ciertas ciencias como la astrología y la astronomía", confirma monseñor Luis Rivas, titular de la cátedra de Sagradas Escrituras de la Universidad Católica Argentina. Teniendo en cuenta ese origen, se cree entonces que partieron desde Persépolis. De allí continuaron el recorrido hasta Babilonia y atravesando Siria y Líbano y Palestina, y llegaron a Belén (ver infografía). Si siguieron ese itinerario, recorrieron más de dos mil kilómetros, quién sabe en cuánto tiempo. La segunda hipótesis dice que eran originarios de Babilonia.

Que por las descripciones de la ubicación de la famosa estrella de Belén, no caben dudas de que desde allí montaron sobre sus camellos. Las pruebas de esa teoría por supuesto que no son contundentes, se reducen a una moneda que tienen grabados que representan a la legendaria estrella. Esa prueba permitiría deducir que fue avistada desde esa pujante ciudad antigua. Si salieron desde allí, en principio recorrieron menos kilómetros. Partieron directamente hacia Faluja; de allí hacia los bordes del Eufrates, siguieron por Tadmur, Damasco, Dar´a, Amán, Jerusalem y destino final: Belén. La tercera teoría dibuja a los reyes en medio de otros paisajes magníficos de aquellos tiempos, Arabia.

En el Antiguo Testamento, en Isaías 60:6, se nombra a Sheba como posible origen de los Reyes, una región que estaba ubicada al sudoeste de Arabia. Si los reyes arrancaron desde allí se deben haber cansado menos porque el camino es más corto.

Para monseñor Rivas, las especulaciones sobre el itinerario mágico no tienen sentido. "El Evangelio dice que estos sabios vieron una estrella que indicaba el nacimiento del rey de los judíos. Si queremos explicar esto de manera comprensible, debemos decir que algunos paganos tuvieron conocimiento del hecho y fueron a homenajear a Jesús. En ese sentido, San Marcos quizá tomó ese dato y lo relató de una forma pintoresca para expresar el estilo de los antiguos orientales", explica.

La falta de datos precisos y la riqueza simbólica del viaje inspiraron los detalles folclóricos que llegaron hasta nuestros días. La Biblia y los pocos datos que difunde sobre ellos, parecen ser motivo suficiente para sumar datos, aunque no tengan mucho fundamento. ¿Por qué se cree que eran apenas tres? Según el profesor de Historia del Arte Jas Elsner, de la Universidad de Oxford, porque los regalos que entregaron fueron tres: oro, incienso y mirra, elementos que en esos tiempos tenían un valor altísimo.

Sin embargo, distintas teorías afirman que en realidad eran 12 o tal vez 60. ¿Por qué se dice que uno de ellos era negro? El profesor Elsner también tiene una explicación para eso: "Esa imagen quedó porque ayuda a expresar un sentido multirracial y multicultural. Sólo a partir del siglo XVI se empieza a representar a Baltazar como si fuera negro. ¿Por qué se conmemora el 6 de enero como su día y se reparten regalos? Monseñor Rivas comenta que el 6 de enero es el día de la Epifanía, en el que se celebra el llamado de todos los hombres a la fe, tanto judíos como paganos, y se leen los textos del profeta Isaías y de los Salmos con los del Evangelio. "Se llegó a decir que todos los que fueron con ofrendas a ver a Jesús eran Reyes. Y también se procuró fijar la cantidad de reyes magos.

El número fue cambiando con el tiempo, hasta que quedó en tres.

Además se les puso nombres, que fueron diferentes según los tiempos y los lugares. Hoy se llaman Melchor, Gaspar y Baltazar y hasta se dice que uno de ellos era negro. Pero nada de eso hay en el Evangelio, sino que fue añadido por la fantasía", agrega Rivas. Lo de los regalos para los chicos es una costumbre que se afianzó en el siglo XIX. Se decía que Gaspar era el encargado de repartir golosinas, miel y frutos frescos. Melchor entregaba zapatos y ropa. Y Baltazar era el que se ocupaba de castigar a los chicos que se habían portado mal durante el año. Les dejaba un trozo de leña o de carbón. Ahora, a nadie se le ocurriría apegarse a esa costumbre que la moda envolvió en olvido.

Arre, camello

Volviendo a la misteriosa ruta que habrían seguido estos Reyes, nunca hubo consenso para definirla con todos sus obstáculos y el modo de sortearlos. Pero en 2000, con los festejos de cambio de siglo y cambio de milenio, se coló un proyecto que intentó despejar algunas dudas. Un proyecto que tuvo como protagonistas a 60 hombres representantes de distintas religiones. El dueño de la idea fue Robin Wainwright, un californiano de buen pasar que cumplió el sueño de recrear el viaje de los Reyes Magos. En septiembre de 2000 reunió a más de 60 peregrinos para seguir una ruta de 1.600 kilómetros. Tardaron 83 días entre preparativos y viaje para llegar a Belén. Y probaron que un recorrido tan extenso no es imposible si los camellos están bien equipados y se organizan los períodos de marcha y descanso. El entusiasmo los llevó a cruzar por Irak, Siria, Jordania y Cisjordania. Los viajeros llegaron a Belén en procesión, alumbrados por velas, en medio de una fiesta organizada por los vecinos de Belén mientras se escuchaba Noche de Paz desde unos parlantes. La ruta que siguieron fue trazada teniendo en cuenta viejos mapas y relatos de textos antiguos. El viaje intentó reflejar las condiciones y dificultades que tuvieron los Reyes.

Se hizo sobre camellos, equipados con buenas sillas de montar y tiendas portátiles que se deplegaban por la noche. Wainwrigth siempre estuvo vestido de blanco y con un turbante en la cabeza.

Nancy, su esposa, viajó a bordo de un camello de 2,5 metros de altura. Y llegaron, como los Reyes. ?

Tomado de: Clarín.
 
IBSN: Internet Blog Serial Number 16-11-1962-06